Es curioso. Son las 3 de la madrugada. Javier, un joven de 26 años, ha sufrido un terrible accidente al chocar su moto contra un trailer de mercancías peligrosas y presenta una fractura-luxación conminuta supraintercondílea de la extremidad distal del fémur izquierda, que para colmo de males es abierta grado III-A de la clasificación de Gustilo y Anderson. Lo que se traduce en una fractura del copón del fémur en la rodilla que el fragmento más grande es como mi uña y además tiene un rajón de palmo y medio por el que salen los cachitos de hueso...
Menos mal que Javier es un chico fuerte. Se encuentra bien y de momento, no hay más lesiones asociadas. Tras inmovilizarle la pierna con una tracción esquelética y mientras preparamos el quirófano de urgencia (que eso es otra odisea...) nos toca el tremendo trago de informar a la familia.
- ¿Familiares de Javier?
- Si, somos nosotros....
- Pasen a esta sala por favor, que vamos a informarles.
Entonces te das cuenta que Javier tiene una gran familia. No se si buena o no, pero numerosa donde las haya. "Por Dios, de dónde ha salido tanta gente..." piensas mientras intentas adivinar quién es el interlocutor principal.
- Bueno, les informo que Javier tiene una fractura muy compleja que afecta a su rodilla izquierda (y les sueltas todo el rollo de la fractura supraintercondílea conminuta abierta grado II de Gustilo y tal y tal).
A todo esto, la familia (representada por el interlocutor principal) ves como va asintiendo con la cabeza en cada fatal adjetivo que vas añadiendo a la fractura y es entonces cuando alguien levanta la mano y te pregunta: "pero doctor..., ¿es fractura o fisura?".
Sabías que podía ocurrir y al final ha ocurrido. La fatal cuestión. Ocho años de EGB (que somos del plan antiguo), tres de bachillerato, el COU, la selectividad, seis de carrera, el puto examen MIR y los cinco de especialidad se te han caido a los pies de golpe.
Obnubilado, irritado, hundido, te gustaría decir eso de "no señora: las fisuras son en otro sitio (el paladar o el ano). Esto es una fractura". Pero no, le contestas amablemente que se trata de un hueso roto (que parece que es algo más serio).
Y es verdad. No sólo somos víctimas de otros profesionales sanitarios que menosprecian nuestra especialidad (especialmente la rama médica) sino que nosotros mismos nos cargamos este oficio. Algún insensato denominó "fisura" a una fractura incompleta de trazo capilar (seguro que lo confundió con un vaso nutricio) y se cargó un siglo de especialidad. No señores, no. Las fisuras en los huesos no existen. Los huesos se rompen o no se rompen, pero no hay fisuras (son binarios: o ceros o unos, pero no a medias). Todos son fracturas, completas o incompletas, oblícuas, transversas o espiroideas, conminutas o no, con tercer fragmento (en ala de mariposa), bifocales, con pérdida de sustancia o no y abiertas o cerradas. Pero en ninguna clasificación pone "fisura"...
Javier fue operado. Todo fue bien dentro de la gravedad. Hace tiempo que no lo veo, pero la madre cada vez que venía a consulta me decía que estaba muy contenta de cómo habíamos tratamos la fisura de su hijo.
2 comentarios:
OK, a partir de ya queda expulsada de mis informes. Adios, fisura; bienvenida, fractura incompleta de trazo capilar.
Jaja, A mí me pasa lo mismo con los aplastamientos vertebrales.
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